Ya se acaba el día de mi cumple. Y una entradita para reflexionar sobre el día.
Me encantan las fechas que señalan comienzos. Me llenan de energía. Me encanta el 1 de enero, me encanta el 24 de enero y me encanta el 1 de septiembre. Me sirven para hacerme nuevos propósitos y siempre estoy muy decidida a cumplirlos, aunque no siempre lo haga. Nunca dejo de proponerme cosas aunque luego no termine de hacerlas porque noto que cada vez doy un paso más en ellas y soy capaz de intentarlas un poquito más.
Este cumpleaños ha estado lleno de cambios. El el primer cumpleaños que paso trabajando. También es el primer cumpleaños que paso 'sin estudiar', estoy haciendo un máster que implica esfuerzo, pero no tengo que memorizar para luego examinarme, es práctico en ese sentido.
También he de decir que la sensación que me llenó a las 12 de la noche fue impresionante. Vi, cómo en menos de 2 minutos, mucha gente me felicitó, justo al principio de MI día. Y lo que más me alegra fue exactamente quiénes fueron las personas que lo hicieron. Estaba sola en el cuarto y no sabía que hacer con esa sensación, así que lo único que pude hacer fue poner un HAPPY (en mayúsculas) en Tuenti y Twitter para que lo viera la gente y sonreír mucho, mucho (creo que me dormí sonriendo).
Y ahora... ¿qué hago yo con los 23? Suena como un número bastante grande. Ya los 22 sonaban a persona mayor, pero los 23 más. Un año lleno de proyectos y de ilusión.
Sólo espero que dentro de un año, vea como todas estas esperanzas que tenía puestas en él este día 24 de enero no queden como una simple anécdota y yo haya sido capaz de esforzarme, de ilusionarme, de saltar, gritar, llorar, reír y sonreír, disfrutar, pensar, aprovechar, madurar, aprender, valorar... pero siempre poniendo en ello todo mi corazón y mis ganas.
FELIZ CUMPLEAÑOS A MÍ MISMA